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domingo, 26 de enero de 2025

SANTIDAD - J. C. RYLE (1816-1900)


III. Razones por las cuales Lot se detuvo

Consideremos ahora las razones que pueden haber contribuido a que Lot se detuviera.

Esta es una cuestión muy importante y le pido que le dé su más seria atención. Saber el origen de una enfermedad es un paso hacia su remedio. Aquel a quien le advierten, de antemano lo arman.

¿Quién entre mis lectores se siente seguro y no teme detenerse? Venga y escuche mientras le cuento algunos pasajes de la historia de Lot. Si actúa como lo hizo él, será un milagro si al final su alma no esté en el mismo estado que la de él.

(1) Una cosa que observo en Lot es que tomó una decisión equivocada siendo muy joven.

Hubo un tiempo cuando Abraham y Lot vivían juntos. Ambos eran ricos y ya no podían seguir viviendo juntos. Abraham, el mayor de los dos, con verdadera humildad y cortesía, le dio a Lot el privilegio de escoger las tierras que prefería cuando resolvieron separarse. Le dijo: "Si fueres a la mano izquierda, yo iré a la derecha; y su tú a la derecha, yo iré a la izquierda" (Gn. 13:9).

¿Y qué hizo Lot? Nos dice la Biblia que vio que los valles del Jordán, cerca de Sodoma, eran ricos, fértiles y recibían abundante lluvia. Eran tierras buenas para pastar el ganado. Él tenía muchos rebaños y ganados, y los campos eran precisamente los que estos requerían. Y estas tierras fueron las que escogió sencillamente porque eran "de riego". (Gn. 13:10).

¡Estaba cerca de la ciudad de Sodoma! No le importaba. ¡Los hombres de Sodoma, que serían sus vecinos, eran impíos! No le interesaba. ¡Eran extremadamente pecadores ante Dios! No le incumbía. La llanura era rica. Las tierras eran buenas. Quería una región así para sus rebaños y sus ganados. Y ante este argumento, todos sus escrúpulos y dudas, si es que los tenía, desaparecieron.

a) Escogió por vista, no por fe.

b) No le pidió consejo a Dios, para que lo preservara de los errores.

c) Consideró las cosas temporales, no las eternas.

d) Pensó en sus ganancias mundanas y en las de su alma.

e) Tuvo en cuenta sólo lo que le beneficiaría en esta vida y olvidó la seria cuestión de la vida venidera.

Este fue un mal comienzo.

(2) Pero observo también que Lot se mezcló con pecadores cuando no tenía ninguna razón para hacerlo.

Al principio mismo, Lot "fue poniendo sus tiendas hasta Sodoma" (Gn. 13:12). Ya he demostrado que esto fue un gran error.

Pero la próxima vez que es mencionado, nos encontramos con que está viviendo en la misma Sodoma. El Espíritu dice expresamente: "Moraba en Sodoma" (Gn. 14:12). Dejó sus tiendas. Renunció a sus tierras. Ocupó una casa en las calles mismas de la impía ciudad.

El texto no nos dice la razón de este cambio. No sabemos de ninguna situación que lo hubiera causado. Estamos seguros de que no puede haber sido por mandato de Dios. Quizá a la esposa le gustaba la ciudad más que el campo, a fin de poder formar parte de la sociedad. Se nota a ojos vista que carecía de gracia. Quizá convenció a Lot que era necesario para beneficio de sus hijas, para que pudieran casarse y tener una vida tranquila. Quizá las hijas lo instaron a vivir en la ciudad para poder tener amistades divertidas. Es evidente que eran chicas con una mentalidad ligera. Quizá a Lot mismo le gustaba la idea, a fin de ganar más con sus rebaños y ganados. Al hombre nunca le faltan razones para confirmar su voluntad. Pero una cosa es segura: Lot vivió en medio de Sodoma sin una razón válida.

Cuando el hijo de Dios hace estas dos cosas que he mencionado, nunca debe sorprendernos si, a la larga, recibimos malas noticia de su alma. No nos debe sorprender, si hace oídos sordos a la voz de advertencia acerca de aflicciones futuras como las tuvo Lot (Gn. 14:12), y termina deteniéndose en el día de tribulaciones y peligros, como lo hizo Lot.

Tome una decisión equivocada en la vida, una decisión no bíblica, asiéntese innecesariamente en medio de un pueblo mundano y estará en la condición más segura para perjudicar su propia espiritualidad y para retrasarse en lo que a su eternidad se refiere. Este es el modo de hacer que el pulso de su alma lata débil y lánguidamente. Es la manera de embotar e insensibilizar sus sentimientos sobre el pecado. Es la forma de apagar los ojos de su discernimiento espiritual hasta que apenas pueda ver la diferencia entre el bien y el mal, y de caminar a los tropezones. Este es el modo de causarle parálisis moral a sus pies y demás miembros, que lo harán andar tambaleante y temeroso por el camino a Sion como si el saltamontes fuera una carga. Es la manera de franquearle la puerta a su peor enemigo, para darle al diablo terreno ventajoso en la batalla, para amarrar sus brazos en la lucha, encadenar las piernas al correr, secar la fuente de su fuerza, quitarle su energía, cortarle el cabello como a Sansón y entregarlo a los filisteos, arrancarle sus propios ojos, girar el molino en la prisión y ser un esclavo.

Ruego a todo lector de este libro que preste mucha atención a lo que estoy diciendo. Grabe estas cosas en su mente. No las olvide. Recuérdelas al amanecer. Tráigalas a su mente al anochecer. Deje que penetren profundamente en su corazón. Si alguna vez va a estar a salvo de "detenerse", no se mezcle innecesariamente con gente mundana. ¡Cuídese de no tomar una decisión como la de Lot! Si usted no quiere que el estado de su alma sea seco, torpe, embotado, perezoso, estéril, pesado, carnal, estúpido y obtuso, ¡cuídese de no tomar una decisión como la de Lot!

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