Versículo para hoy:

lunes, 9 de febrero de 2015

50 Sombras de Hipocresía Cultural - Josué Barrios

Algo que me impacta cuando me adentro en la Palabra de Dios, es ver que la única razón por la cual Él no ha desatado todo su juicio sobre la humanidad, es por Su gran misericordia. Una vez leí a alguien decir que el pecado tendría menos adeptos si las consecuencias fueran inmediatas. Continuar leyendo...


Cómo dar autoridad funcional a la Biblia - Pr. John Piper

«Dios es la autoridad suprema en el universo, pues Él lo hizo, y además lo posee completamente, y lo comprende perfectamente, y es infinitamente digno de lealtad. Así que Dios es la realidad suprema del universo.
Por tanto, cuando Él habla, su oratoria tiene autoridad suprema sobre nuestras vidas. Y la Biblia es el lugar donde Dios ha hablado». Continuar leyendo...


Haced memoria - Nancy Leigh DeMoss

FEBRERO 9

"Y consultó David a Jehová". 2 Samuel 5:23.



CUANDO David hizo esta consulta acababa de luchar con los filisteos y de obtener una significativa victoria. Los filisteos subieron en gran número, pero, por la ayuda de Dios, David los puso en fuga fácilmente. Notemos, sin embargo, que cuando los filisteos vinieron por segunda vez, David no les salió al encuentro antes de consultar a Jehová. Como había salido victorioso una vez, podía haber dicho, como lo han hecho muchos en otros casos: "Saldré victorioso otra vez: puedo estar seguro de que si he conquistado una vez, triunfaré aun otra vez. ¿Por qué, pues, esperar para consultar al Señor?" David no procedió así. Ganó una batalla por el poder del Señor; pero no se aventurará en otra hasta asegurarse el mismo poder. El preguntó al Señor: "¿Iré contra ellos?", y esperó hasta que la señal de Dios le fue dada. Aprendamos de David a no dar ningún paso sin Dios. Cristiano, si quieres conocer la senda del deber, ten a Dios por brújula; si deseas dirigir tu barco a través de las imponentes olas, por el timón en las manos del Todopoderoso. Muchas rocas podrían ser esquivadas si permitiésemos que nuestro Padre gobierne el timón; muchos bancos de arena podrían ser evitados si dejáramos a su soberana voluntad escoger y mandar. Debemos darnos cuenta de que la providencia de Dios nos guía; y si la providencia tarda, esperemos hasta que la providencia llegue. El que se antepone a la providencia, se sentirá gozoso si vuelve otra vez al lugar de partida. "Te enseñaré el camino en que debes andar", es la promesa que Dios hace a su pueblo. Llevemos a él todas nuestras perplejidades y digámosle: "Señor, ¿qué quieres que haga?" No dejes tu casa esta mañana sin inquirir primero la voluntad del Señor.

Fuente: LECTURAS MATUTINAS de Charles Haddon Spurgeon.