Versículo para hoy:

viernes, 2 de febrero de 2024

FEBRERO 2 - Nuevas Misericordias Cada Mañana - Paul David Tripp

 No te encuentras solo contra la tentación porque Aquel que es tu Salvador es también tu fortaleza, tu refugio y tu defensa.

La Biblia te llama, como creyente, a vivir con tres realidades presentes. La primera es la que siempre te saluda cada día. La realidad es que vives en un mundo que ha sido dramáticamente quebrantado por el pecado y no funciona de la forma como Dios lo diseñó. Pablo lo dice muy bien en Romanos 8, señalando que el mundo está "gimiendo" mientras espera la redención. Debido a que el mundo donde vivimos no opera según el diseño original de Dios, te presenta tentaciones a dondequiera que vas. Estas tentaciones juegan con el pecado y la debilidad que aún viven en ti y que están siendo erradicados progresivamente por la gracia de Dios. Tú y yo debemos vivir conscientes de la tentación; el fallar en esto es fallar en reconocer la condición caída del mundo en el cual vivimos.

La segunda realidad es que, aunque pensemos que somos hijos de Dios estamos faltos del poder y queremos pelear nosotros mismos la batalla espiriual a la que el mundo de pecado y tentación nos atrae. Al enfrentar nuestra vulnerabilidad y debilidad, hay cosas por las que tú y yo debemos orar regularmente. Debemos orar por un deseo puro, por sabiduría para reconocer los engaños del enemigo y por fortaleza para enfrentar aquellas batallas que no podamos evitar. Todo esto sale a flote al reconocer humildemente que lo malo no siempre nos parece malo. Que lo que Dios dice que es peligroso no siempre se ve peligroso. El mal no siempre parece tan malo a nuestros ojos. Así que necesitamos protección no solo para la tentación externa, sino para nuestros propios ojos ciegos y nuestros corazones errantes.

Finalmente, tú y yo somos bienvenidos a descansar en la realidad de que en este mundo caído que nos lanza tentaciones cada día no estamos ni estaremos solos. Dios está con nosotros. Él provee la seguridad que nosotros no podíamos conseguir por nosotros mismos. Tú y yo podemos enfrentar la dura realidad de la vida en este mundo incierto con valor y esperanza porque no nos enfrentamos a ellos por nosotros mismos. Emmanuel ("Dios con nosotros") es con nosotros en poder, gloria y gracia. Las palabras de Sofonías 3:17 nos traen esperanza hoy como lo hicieron generaciones atrás cuando fueron escritas: "Porque el Señor tu Dios está en medio de ti como guerrero victorioso".

Para profundizar y ser alentado: 1 Corintios 10:1-13.

FEBRERO 1 - Nuevas Misericordias Cada Mañana - Paul David Tripp

 Por supuesto que enfrentarás dificultades. Dios está abriendo los dedos de tus manos para que puedas dejar ir tus sueños, descansar en Su consuelo y responder a Su llamado.

Piensa en las palabras de Pedro al comienzo de su carta en el Nuevo Testamento: "Esto les causa gran regocijo, aun cuando les sea necesario soportar por algún tiempo diversas pruebas y aflicciones; pero cuando la fe de ustedes sea puesta a prueba, como el oro, habrá de manifestarse an alabanza, gloria y honra el día que Jesucristo se revel. El oro es perecedero y, sin embargo, se prueba en el fueg; ¡y la fe de ustedes es mucho más preciosa que el oro!" (1 Pedro 1:6-7, RVC).

Al comenzar su carta, Pedro nos da un resumen pasado, presente y futuro del plan redentor de Dios, pero su énfasis es sobre lo que Dios está haciendo aquí, ahora mismo, entre la primera y segunda venida de Jesús. De todos los conceptos que pudo haber usado para describir lo que Dios está haciendo ahora, selecciona estos tres: aflicciones, pruebas y puesta a prueba. Estos tres conceptos son los que esperamos que jamás describan nuestras vidas. Ninguno de nosotros se levanta por la mañana y ora: "Dios, si me amas, hoy me mandarás sufrimiento". Más bien, cuando nos encontramos en medio de la dificultad, somos tentados a ver el sufrimiento como una señal de infidelidad o desatención por parte de Dios.

Sin embargo, Pedro no ve los momentos difíciles como obstáculos ante el plan de Dios o como indicaciones de que el plan de Dios ha fracasado. No, para él son parte importante del plan de Dios. En lugar de ser señales de Su falta de atención, son señales de un amor celoso y redentor. En Su gracia, Dios te guía a donde no has pensado ir para producir en ti lo que no podrías haber alcanzado por ti mismo. En estos momentos, Él altera los valores de tu corazón para que abandones tu pequeño reino y te entregues por completo a Su reino glorioso y lleno de gracia.

Dios está trabajando justo ahora, pero no para darnos una vida predecible, cómoda y placentera. Él no está trabajando para transformar nuestras circunstancias, sino que usa las circunstancias difíciles para transformarnos. Quizá, en los momentos difíciles, cuando estamos tentados a preguntarnos dónde está la gracia de Dios, es precisamente esa gracia lo que estamos recibiendo, pero no en la forma de una almohada suave o una bebida refrescante. Más bien, en esos momentos, somos bendecidos con la gracia de las dificultades que transforman nuestros corazones, porque el Dios que nos ama sabe que esta es exactamente la gracia que necesitamos.

Para profundizar y ser alentado: Santiago 1:2-11

ENERO 31 - Nuevas Misericordias Cada Mañana - Paul David Tripp

 Si eres hijo de Dios, no estás solo contra el mundo, tal como David no estaba solo contra el gran guerrero Goliat.

Me encanta la historia del ejército israelita en el Valle de Ela cuando enfrentaron al ejército filisteo (1 Samuel 17). En el primer día de batalla, el gran guerrero Goliat retó a los israelitas a que enviaran a su mejor hombre para pelear contra él. Recuerda, estos soldados israelitas eran el ejército del Dios Altísimo, el Señor todopoderoso, quien había prometido entregar a sus enemigos en sus manos. Aun así, ¿qué fue lo que hicieron los soldados ante el reto de Goliat? Se atemorizaron e inmediatamente huyeron a sus tiendas. Podemos imaginarlos diciendo: "¿Qué vamos a hacer? ¿Qué vamos a hacer?" Esa fue su respuesta por cuarenta días. ¿Por qué no enfrentaban a Goliat? ¿Por qué no peleaban en el nombre del Señor? La respuesta es clara e inevitable -eran un ejército con un grave problema de amnesia. Estaban llenos de miedo debido a que habían olvidado quiénes eran. Se comparaban a sí mismos con el enorme guerrero y concluían que no había forma de obtener la victoria.

David apareció en el campamento para llevarles de comer a sus hermanos. Se preguntaba por qué se les permitía a los filisteos burlarse del ejército de Dios. Para sorpresa de muchos, David dijo que iría; que él respondería ante el reto de Goliat. ¿Acaso David estaba siendo arrogante? ¿Estaba delirando, tal vez? No, él sabí quién era y lo que significaba ser un hijo del Dios viviente. David llegó a la conclusión espiritual correcta. No se trataba de él contra el gran guerrero. No, era el pobre guerrero en contra del Dios todopoderoso. Ahora, ¿quién piensas que ganaría? David caminó hacia el valle debido a que su identidad era clara para él, y ganó la victoria debido a que sabía lo que había recibido.

¿Qué identidad te asignarás hoy? ¿Enfrentarás tu vida basándote en lo que tienes a tu disposición o en quién eres como hijo del Rey de reyes y Señor de señores? ¿Vivirás con temor y miedo o con valentía y esperanza? ¿Evitarás los retos de la vida debido al miedo o descansarás en la presencia, poder y la gracia de tu Padre, quien gobierna todas las cosas? Que el Señor te dé gracia para recordar tu identidad de hijo en esos momentos cuando más lo necesites.

Para profundizar y ser alentado: Efesios 1:3-14