Versículo para hoy:

domingo, 5 de agosto de 2018

AGOSTO 5

“La ley de su Dios está en su corazón; por tanto, sus pasos no vacilarán”. Salmo 37:31.

Poniendo la ley en el corazón, el hombre entero va bien. Allí es donde la ley debe estar; porque entonces se halla en el lugar señalado para ella, como las tablas de piedra en el arca. En la cabeza confunde, a la espalda pesa, en el corazón sostiene.

¡Qué palabra más excelente se usa aquí, “la ley de su Dios”! Cuando conocemos al Señor como nuestro Dios, su ley viene a ser libertad para nosotros. Dios con nosotros en el pacto, nos hace prontos para obedecer su voluntad y andar en sus mandamientos. ¿Es este el precepto de mi Padre? Entonces me deleitaré en él.

Aquí se nos garantiza que el hombre de corazón obediente será sostenido en cada paso que tome. Él hará lo que es recto, y por lo tanto hará lo que es prudente. La acción santa es siempre la más prudente, aunque tal vez por el momento no lo parezca. Vamos andando por el gran camino real de la providencia y gracia de Dios cuando nos mantenemos en el camino de su ley. La Palabra de Dios nunca ha engañado a un alma; sus claros consejos a que andemos humildemente, justamente y con amor, y en el temor del Señor, son tanto palabras de sabiduría para hacer que nuestro camino prospere, como reglas de santidad para guardar nuestros vestidos limpios. Anda seguramente quien anda rectamente.

FUENTE: Libro de Cheques del Banco de la Fe – Charles H. Spurgeon.