Versículo para hoy:

viernes, 20 de julio de 2018

El Padre Nuestro, día 18 - Nancy DeMoss de Wolgemuth



JULIO 20

“Y la segunda vez, sin pecado, será visto de los que le esperan para salud”. Hebreos 9:28.


Esta es nuestra esperanza. Aquel a quien ya hemos mirado, como viniendo una vez para agotar los pecados de muchos, se manifestará otra vez a los hijos de los hombres; esta es una perspectiva dichosa en sí misma. Pero este segundo advenimiento tiene ciertas señales especiales que lo glorifican grandemente.

Nuestro Señor habrá terminado el asunto del pecado. De tal manera lo ha quitado de su pueblo, y tan eficazmente ha llevado su paga, que no tendrá nada que ver con él en su segundo advenimiento. No presentará ninguna ofrenda para el pecado, porque habrá quitado del todo el pecado.

Nuestro Señor entonces consumará la salvación de su pueblo. Serán finalmente y perfectamente salvos y gozarán en todos los sentidos la plenitud de esa salvación. No viene a llevar la paga de nuestras transgresiones, sino a traer el resultado de su obediencia; no viene a quitar nuestra condenación, sino a perfeccionar nuestra salvación.

Nuestro Señor aparece así solamente a los que le esperan. No será visto en este carácter por hombres cuyos ojos son cegados con el egoísmo y el pecado. Para ellos será un juez terrible, y nada más. Primeramente tenemos que mirarle, y después esperarle; y en ambos casos, nuestra mirada será para vida.

FUENTE: Libro de Cheques del Banco de la Fe – Charles H. Spurgeon.