Versículo para hoy:

jueves, 12 de septiembre de 2019

Un clima favorable para la vida - Nancy DeMoss de Wolgemuth



12 de setiembre – INMERSOS EN SU SERVICIO

Mientras lo apedreaban, Esteban oraba. «Señor Jesús» decía, «recibe mi espíritu». Luego cayó de rodillas y gritó: «¡Señor, no les tomes en cuenta este pecado!» Cuando hubo dicho esto, murió. Hechos 7:59-60.

Observemos la muerte de Esteban y notemos su carácter general. Nos sorprende que sucediera en el mejor momento de su servicio. Lo habían designado oficial de la iglesia en Jerusalén para velar que las ofrendas se distribuyeran de forma correcta entre los pobres, en especial, las viudas griegas. Desempeñó su labor para la satisfacción de toda la iglesia y llevó a cabo un servicio excelente, de modo que los apóstoles pudieron dedicarse de lleno a su verdadero trabajo, es decir, la predicación y la oración, y no es algo insignificante asumir la carga de otro si eso libera a aquel para que pueda dedicarse a un servicio más eminente que el que nosotros mismos pudiéramos desempeñar. Pero Esteban no se conformó con ser un diácono, sino que comenzó a ministrar en las cosas santas como un defensor de la Palabra, lo que hizo con gran poder, ya que estaba lleno de fe y del poder del Espíritu Santo. Esteban sobresale en la lista de los héroes de la historia de la iglesia como un líder, tanto que los enemigos del evangelio reconocieron la utilidad de su prominencia y lo hicieron objeto de su más fiera oposición, pues por lo general se encolerizan más contra aquellos que hacen el mayor bien. Esteban permaneció en la vanguardia del ejército del Señor; sin embargo, lo mataron. «Un misterio», dicen algunos. «Un gran privilegio», digo yo. ¿Quién desea que Dios lo lleve en algún otro tiempo? ¿Acaso no es mejor morir con el yugo puesto, cuando todavía eres útil? ¿Quién desea vivir hasta ser una carga, en vez de una ayuda?

A través de la Biblia en un año: Salmos 111-114

FUENTE: Charles H. Spurgeon -Tomado del libro “A los Pies del Maestro”, Compilado por Audie G. Lewis.