Versículo para hoy:

lunes, 22 de enero de 2018

Amor y humildad - Tim Challies en español

Llevando a las mujeres a la Palabra, día 2 - Nancy DeMoss de Wolgemuth



ENERO 22

“Bienaventurado el que piensa en el pobre; en el día malo lo librará Jehová”. Salmo 41:1.

Es el deber de un hombre cristiano pensar en los pobres y tener un corazón tierno para con ellos; porque Jesús los puso con nosotros y cerca de nosotros cuando dijo: “A los pobres siempre los tenéis con vosotros”.

Muchos dan su dinero a los pobres con prisa, sin pensamiento; y muchos más no les dan nada. Esta preciosa promesa pertenece a los que “piensan” en los pobres, consideran su caso, piensan en medios para su beneficio y los llevan a cabo con consideración. Podemos hacer más con mostrar solicitud que con dar dinero, y aún más con las dos cosas juntas. El Señor promete mostrar su propia consideración en tiempos de apuro a los que piensan en los pobres. Él nos librará de la pena si ayudamos a otros cuando están en la pena. Recibiremos ayuda providencial muy extraordinaria si el Señor ve que procuramos proveer para otros. Tendremos días malos a pesar de ser generosos; pero si somos benévolos, tenemos derecho a liberación especial, y el Señor no negará su propia palabra y obligación. Los avarientos se pueden amparar a sí mismos, pero el Señor ayudará a los creyentes atentos y generosos. De la manera que habéis tratado a otros, así hará el Señor con vosotros. Vaciad vuestros bolsillos.

FUENTE: Libro de Cheques del Banco de la Fe – Charles H. Spurgeon.