Versículo para hoy:

viernes, 9 de noviembre de 2018

Gracia para corazones cansados y desanimados - Nancy DeMoss de Wolgemuth



NOVIEMBRE 9

“Y sabrán que yo su Dios Jehová soy con ellos, y ellos son mi pueblo, la casa de Israel, dice el Señor Jehová”. Ezequiel 34:30.

Es una bendición excelente que seamos el pueblo del Señor, pero es una bendición consoladora saber que lo somos. Una cosa es esperar que Dios está con nosotros, y otra cosa es saberlo. La fe nos salva, pero la certeza nos satisface. Aceptamos a Dios como Dios nuestro cuando creemos en Él; pero tenemos gozo cuando sabemos que Él es nuestro y que nosotros somos suyos. Ningún creyente debiera estar satisfecho con una vaga esperanza, sino que debiera pedir al Señor que le guíe a la plena certidumbre, para que así las cosas esperadas vengan a ser cosas ciertas.

Es cuando gozamos de las bendiciones del pacto, y vemos al Señor Jesús como “una planta por nombre” (Ezeq. 34:29) levantado a favor nuestro cuando venimos al conocimiento claro de la gracia de Dios hacia nosotros. Aprendemos que somos el pueblo de Dios, no por la ley, sino por la gracia. Miremos siempre hacia la gracia. La certidumbre de la fe no puede venir nunca por las obras de la ley. Es una virtud evangélica y solamente nos puede alcanzar por medio del evangelio. No miremos adentro de nosotros mismos. Miremos solamente al Señor. Viendo a Jesús, vemos nuestra salvación.

Señor, mándanos tal marea alta de tu amor que seamos llevados más allá del fango de la duda y del temor.

FUENTE: Libro de Cheques del Banco de la Fe – Charles H. Spurgeon.