Versículo para hoy:

viernes, 22 de febrero de 2019

Pasa tu experiencia a la próxima generación - Nancy DeMoss de Wolgemuth



22 de febrero – ORGULLO AGRADECIDO

Pero gracias a él ustedes están unidos a Cristo Jesús, a quien Dios ha hecho nuestra sabiduría –es decir, nuestra justificación, santificación y redención- para que, como está escrito: «El que se quiera enorgullecer, que se enorgullezca en el Señor». 1ª Corintios 1:30-31.

Cuando agradeces a Dios por las buenas cosas que ha hecho por ti, agradécele no solo por guardarte del pecado sino también por permitirte hacer su voluntad. Ningún hombre tiene el derecho de darse el crédito a sí mismo por su propia integridad, porque si es cristiano, la integridad es el don de la gracia de Dios y la obra del Espíritu de Dios dentro de él. Si en tu juventud sí te formaste un juicio cándido y honesto de la Palabra de Dios y luego quemaste todos los puentes y rompiste toda conexión con aquello que quedaba detrás de ti, si te atreviste a echar tu suerte con el despreciado pueblo de Dios, bendícelo por eso y considera que te hizo un gran favor al permitirte actuar así; y si, cuando has sido tentado con grandes sobornos, has sido capaz de decir: «Aléjate de mí, Satanás» y seguir de cerca los talones de Cristo, dale a Dios la gloria por eso y bendice su santo nombre. En un caso así, la virtud es su propia recompensa. Ser obediente a Cristo es una de las mayores bendiciones que Dios pudiera haber derramado sobre cualquier hombre. Hay algunos de nosotros que tienen que agradecer a Dios que cuando hubo momentos de aprieto, no nos atrevimos a ceder; sino que cuando los amigos y los enemigos por igual señalaban otro camino, nosotros vimos cuál era el camino del Maestro y lo seguimos por su gracia. Tendremos que agradecerle esto por toda la eternidad.

A través de la Biblia en un año: Lucas 15-16

FUENTE: Charles H. Spurgeon -Tomado del libro “A los Pies del Maestro”, Compilado por Audie G. Lewis.