Versículo para hoy:
jueves, 5 de marzo de 2020
5 de marzo - Vivos en Cristo - Ray Stedman
La verdad más importante en todo el
cristianismo es la que se expresa aquí: a nosotros se nos concede vida
juntamente con Cristo. Fíjese usted en que Pablo dice “con Cristo” en tres
ocasiones: “Nos dio vida... con Cristo”. Con Cristo “nos resucitó”. Y “nos
hizo sentar... con Cristo”. Él ha venido a morar en nosotros y se ha unido
con nosotros, de manera que somos una sola persona con Él. Éste es el hecho
más importante sobre el cual podemos fundar el resto de la fe y la
experiencia cristiana: esta gran y tremenda afirmación de que estamos vivos
con Jesucristo.
¿Recuerda usted cómo el Señor mismo
enseñó esto? Él dijo: “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos” (Juan 15:5).
¿Sabe usted dónde acaba la rama y comienza la vid? No, son partes de una sola
planta que comparten la misma vida. De manera que a partir de aquí nuestra
identidad ya no se encuentra “en Adán” sino “en Cristo”. Ya no somos
sencillamente seres humanos corrientes, sino que nos hemos convertido en una
nueva creación, que ha empezado de nuevo, unida a la vida de Jesucristo.
Más adelante en esta epístola Pablo
compara a la iglesia con un cuerpo, del cual Cristo es la cabeza. ¿Ha
examinado usted últimamente su cuerpo? ¿Se ha fijado usted en que sus dedos
no se despegan del cuerpo si usted sencillamente los tuerce un poco y los
jala? Están unidos al cuerpo y por ello comparten la vida del cuerpo. No
están unidos por medio de ningún proceso mecánico, sino que son más bien una
parte orgánica. Estas figuras nos han sido todas presentadas para mostrarnos
la manera íntima en que estamos unidos con Jesucristo, para que entendamos
que Él es nuestra vida.
Así que no piense usted nunca
acerca de sí mismo de ninguna otra manera, porque toda la obra del enemigo
tiene como propósito hacer que usted deje de creer esto y que vuelva a pensar
que no es usted otra cosa que un individuo corriente, que se pasa la vida
luchando, intentando conseguir hacer las cosas de la mejor manera posible,
teniendo que movilizar todos sus recursos con el fin de intentar adelantar a
los otros seres humanos y conseguir todo lo que pueda usted en lo que se
refiere a sentirse realizado en la vida. Siempre que usted crea esto, volverá
a actuar como lo hizo con anterioridad, volviendo a experimentar la desdicha
y aflicción. Usted solo puede escapar a esto cuando regresa de nuevo a esta
verdad central: ¡que estamos vivos en Jesucristo!
Hay una cosa más en la que debemos
de fijarnos aquí. Estos verbos están todos ellos en tiempo pasado. Esto es
algo que ha sucedido, no algo que va a suceder. Es algo que ya ha tenido
lugar al creer usted en Jesucristo. Usted no tiene que esforzarse por
conseguirlo; no es algo que consigan los grandes santos después de años
enteros de esfuerzos. Es algo que ya es una realidad, y todo cristiano tiene
esta experiencia. Nosotros hemos cobrado vida en Jesucristo, de manera que no
podemos continuar siendo como antes. Incluso si lo intentamos, no podremos
conseguirlo. Este es el motivo por el que a veces les digo a las personas que
se desaniman respecto a su vida cristiana: “Pues, abandónela usted, intente
no ser cristiano y verá usted lo que sucederá”. No pueden hacerlo y saben que
no pueden porque son nuevas criaturas, que tienen vida en Jesucristo.
Padre, te doy gracias por esta gran
verdad. Te ruego en oración que me dejes claro que éste es quien soy y que
nunca podré enfrentarme con la vida como debo de hacerlo hasta que no haya
entendido esto.
|
Aplicación a la vida
|
Desde el punto de vista de la
experiencia, la verdad más importante en todo el cristianismo es esta: que
estamos vivos en Cristo. Considerando esta realidad, ¿hemos descubierto
nosotros Su vida que es nuestra vida?
|
|
Suscribirse a:
Entradas (Atom)