lunes, 2 de marzo de 2020
2 de marzo - En los lugares celestiales - Ray Stedman
Recuerde el lector que todas estas
bendiciones están a nuestra disposición en el ámbito al que Pablo se refiere
aquí como los lugares celestiales. No significa ir al cielo cuando se muera
usted. ¡Tenemos un concepto tan distorsionado acerca del cielo! El cielo,
como la mayoría de las personas se lo imaginan, no es un lugar que a mí me
resulte atractivo con su humedad, sus nubes de lluvia, con sus arpas
desafinadas y sus túnicas blancas. Un buen folleto de viajes podría hacer que
el oeste de Texas nos diera la impresión de ser preferible al cielo. Sin
embargo, la mayoría de las personas cree que esto es a lo que se refiere
Pablo cuando menciona los lugares celestiales.
No, en los lugares
celestiales es una referencia a las realidades invisibles de nuestra
vida actual, y sin duda estas realidades se extienden a la eternidad, pero
son además algo que se experimentará ahora en su vida interior, en el
ámbito de sus pensamientos, que es donde siente usted el conflicto y la
presión, la lucha y el desastre, que forman parte de los lugares celestiales.
Es donde estamos expuestos al ataque de los principados y los poderes que se
mencionan en el capítulo 6, esos espíritus oscuros en los lugares elevados
que se apoderan de nosotros, haciendo que nos sintamos deprimidos y
asustados, haciendo que nos sintamos ansiosos u hostiles. Los lugares
celestiales no son tan solo el ámbito del conflicto, sino además el lugar
donde Dios puede liberarnos y aliviarnos, donde el Espíritu de Dios nos
tiende la mano, por así decirlo, en lo que se refiere a nuestro intelecto,
las emociones y nuestra voluntad. Es el ámbito de nuestros profundos e
imperiosos deseos que surgen de nuestro interior y crean una sensación o bien
de inquietud o de paz, dependiendo de su procedencia. Así que no considere
usted esto como si fuese algo procedente de algún lugar en el espacio. Estas
bendiciones le pertenecen a usted en lo que se refiere a su experiencia interior
ahora mismo si está usted en Jesucristo.
Evidentemente, todo esto lo
recibimos como un gran paquete en Cristo. Si no es usted cristiano,
evidentemente no tiene usted derecho a estos beneficios, porque no le
pertenecen. No hay manera alguna de que se apropie usted de ellos a menos que
esté usted en Cristo. Pero si está usted en Cristo, no hay nada que le
impida a usted tener todos ellos, en cada momento de cada día. Es por eso que
es tan importante que descubramos lo que son.
Estas son mucho más que meras ideas
teológicas. Son hechos, verdades fundamentales que nos sirven de apoyo en
todos los momentos de nuestra vida. A menos que entienda usted estos hechos
no puede usted hacer uso o beneficiarse de ellos. En ese sentido son como
leyes naturales. Las leyes de la naturaleza funcionan sin que tenga nada que
ver cómo nos sintamos y en ese sentido son impersonales.
En mi experiencia realizando
trabajos eléctricos en un ala adicional a mi casa, he descubierto que la
electricidad sigue un estilo propio y hace caso omiso a cómo yo pueda
sentirme en ese momento. ¡Esa puede resultar una experiencia espantosa! No se
siente de ninguna manera impresionada por mi profesión como pastor y no duda
en modo alguno en lo que se refiere a desquitarse ante ninguna violación de
sus leyes que yo pueda haber cometido. Por lo tanto, de mí depende descubrir
cómo funciona y a respetarla si quiero utilizarla. Lo mismo es cierto en lo
que se refiere a estos importantes hechos. No le serán a usted de ninguna
ayuda si no descubre usted lo que son y cree lo suficientemente en ellos como
para actuar sobre la base de los mismos.
Padre, te doy gracias por estas
tremendas verdades. Pido en oración que mi manera de entenderlas pueda estar
a la altura de las mismas. Sin embargo, no puedo entenderlas aparte de la
obra de Tu Espíritu, y te pido que Tú abras mis ojos y me ayudes a ver que
estas cosas son verdaderamente ciertas.
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Aplicación a la vida
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Existen verdades que son el
fundamento que nos capacitan en cada momento de nuestra vida. ¿Hemos avanzado
yendo más allá de las meras ideas teológicas con el fin de hacer nuestra la
Vida que fuimos destinados a vivir?
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